Leyendo este artículo hay algo que me viene a la cabeza y claro, me preocupa enormemente. Y es que en mi caso ya soy usuario de powerbalance. No se si al comprar este collar cuántico entrarían en algún tipo de conflicto.
Una traducción cutre-casera, por si alguien no entiende el catalán:
Ayer el Congreso español aprobó el último tramite de la que seguramente es la medida más antisocial de los últimos 30 años: la subida de la edad de jubilación de los 65 a los 67 años, y el aumento de los años de cotización mínima hasta los 37 para poder cobrar la totalidad de la pensión. Una medida que durante las próximas décadas afectará la vida cotidiana de millones de ciudadanos del Estado español, pero que no ha impedido que su aprobación pase sin demasiada afectación en la mayoría de medios, que han cubierto el tema en base a notas de agencias realizadas seguramente a partir de los comunicados de prensa del mismo Congreso.
El problema de esta falta de criterio propio y de no leerse directamente las leyes por parte de los periodistas es se pueden escapar los detalles importantes. Así, una de las medidas más dramáticas, la equiparación de la pensión mínima con cotizaciones a la no contributiva -y que no surgieron cuando se llegó al acuerdo de los sindicatos y la patronal el pasado enero- ha pasado totalmente inadvertida.
Según explica el abogado laborista Àlex Tisminetzky en la revista alternativa “l'Accent”, a día de hoy, cualquier persona que hubiera cotizado hasta 15 años tenía derecho a una pensión mínima aunque, con el cálculo en la mano, no llegara. Pero a partir del 2013 esto se elimina, lo que significa reducir estas pensiones de los actuales 601,40 euros a los 347,60 de la pensión no contributiva. Un cambio que afectará especialmente a los sectores de renta más baja de nuestra sociedad y que supone un agravio sin remedio para la gente que ya se acerca a la edad de jubilación y, de repente, se encontrará cobrando la mitad de lo que hasta ahora le tocaba sin poder remediarlo. Pero esto no ha impedido que Valeriano Gómez, ministro español de Trabajo, “lamente” que la reforma de las pensiones se vea como un recorte social sin que ningún periodista le cuestione nada.
Completamente de acuerdo. Como desarrollador de aplicaciones Android a día de hoy todas las aplicaciones que he publicado en el Market han sido gratuitas. Pero puede que el día que termine una aplicación más compleja que estoy haciendo me interese colocarla a X céntimos.
El precio bajo beneficia al desarrollador porque más gente tiene acceso al producto, y a quién lo compra, al ser mas barato.
Lástima que siempre habrá algunos (o muchos) a quien les resulte más fácil buscar estos juegos/aplicaciones piratas, que recompensar el trabajo que hay detras.