1. prohibir la construcción.
2. dejar que se vayan cayendo lentamente las casa mal hechas.
3. hacer una planificación y dar premios a las ciudades con mejores diseños urbanísticos.
#8 ostia pensaba que era un quejido cómo de asco...
Yo nací en España pero desde que nací mi madre ha estado intentando enseñárme un dialecto del argentino. A ver si consigo traducirloa al castellano!! (aunque igual no es posible)
«Antes que nada quiero aclarar que no desmerezco para nada todo los esfuerzos que se están haciendo por Haiti que por supuesto son bienvenidos e importantisimos para esta pobre gente que ademas de venir padeciendo muchos sufrimientos desde hace años tienen que soportar esta tragedia de semejante terremoto.
El tema de hoy es por que me da la impresión de que algunos se olvidan de que aquí en Argentina también estamos padeciendo una tragedia y no veo que se hagan campañas acordes para recaudar dinero, alimentos, remedios y cualquier cosa que nuestros mas necesitados demanden, en especial los niños. Me sentí muy raro hace unos días cuando me enteré de que un conocido había donado vía tarjeta de crédito a Haití pero jamas se le ocurrió enviar un paquete de polenta al norte argentino. Y no es que se olvide de los suyos, simplemente el bombardeo mediático hizo que donar a este país fuese una cosa muy sencilla y fácil.
Voy a dejar una serie de enlaces a distintas paginas web donde pueden informarse o donar desde alimentos a dinero. Son las mas renombradas que yo conozco, si alguien quiere agregar un link me avisa en los comentarios.
Si están indecisos para donar, les dejo las instantáneas que fotógrafos argentinos y extranjeros capturan de nuestros mas necesitados.»
Ahorá ya por fin se entiende verdá? qué diferencia!!
#3 bueno croe que a #9 tras ese discurso tan largo y bien argumentado lleva una parte de razón: dos de los peores libros que he leído en mi vida tienen un boca a boca muy potente: El Alquimista y Loa pilares de la tierra.
Ese último por cierto fue sabiamente rechazado por algunas editoriales que prefirieron conservar el respeto a forrarse como unos cerdos con billetes de 1 000 000 dólares.