#9 Yo no quiero hundirla, he hecho un comentario porque es lo que ocurre con todas las noticias de hombres y mujeres que matan a alguien. La prueba de ello son los comentarios que hay debajo del mío.
Bueno, pues hemos podido ver en vivo cómo el sistema se regula solo. De un movimiento ciudadano fruto del hartazgo surgen unos supuestos líderes que se metamorfosean en ultracuerpos de un nuevo partido político anulado por lo que precisamente criticaba el movimiento ciudadano: hipocresía, mesianismo, alejamiento de los ciudadanos, la política como un fin en sí mismo.
Desde de un punto de vista antropológico y sociológico esto es un buen caso de estudio. La sociedad, por acción o inacción, ha transformado un "peligro" para su estabilidad en un partidito inocuo y despreciable.
El votante español, y el de todas partes, es maleable. Pero este fue uno de los casos en que sacar a un delincuente genocida como Aznar del poder era necesario.