Posiblemente el proyecto más tonto que he emprendido, fue una odisea. Es difícil explicar del todo la profundidad de la madriguera a la que me llevaron, pero al final sólo salí parcialmente destrozado. Como sugiere el título, se trata de una simulación de motor de combustión interna físicamente realista (o al menos, algo realista). También genera un audio que, en mi opinión, es uno de los mejores generados procedimentalmente para un motor V8 que he escuchado.
