A Elisa le tembló hasta la voz un martes de hace dos semanas. Abrió el buzón, leyó una carta dirigida a su madre y se encontró con que un bufete de abogados le instaba a pagar más de 1.000 euros si no quería ir a juicio. El mayor problema no era ni mucho menos la demanda, sino que su madre había fallecido tres meses antes, víctima de un cáncer.
|
etiquetas: pirateria , euskaltel , bilbao