Para crear fibras semiconductoras que funcionen de manera confiable, deben ser flexibles y sin defectos para una transmisión de señal estable. Sin embargo, los métodos de fabricación existentes provocan estrés e inestabilidad, lo que provoca grietas y deformidades en los núcleos de los semiconductores, lo que afecta negativamente a su rendimiento y limita su desarrollo. Los científicos de NTU realizaron modelos y simulaciones para comprender
www.nature.com/articles/s41586-023-06946-0