Recuerdo de la época de mi vida en el seno de la iglesia católica, que me repetían constantemente que mentir era pecado. Mentir es pecado señor Feijóo y usted en el debate que tuvo con el presidente del gobierno mintió reiteradamente a sabiendas de que lo hacía.Le voy a desglosar al menos diez de esas mentiras, las más importantes, porque además hubo muchas más. En apenas 100 minutos batió usted señor Feijóo un récord mundial, superando al mismísimo Donald Trump.

El parlamentario de extrema derecha, cuyo partido utiliza las formas en masculino y el término “síndico” en lugar de “síndica” para referirse a las seis portavoces parlamentarias, se ha negado a rectificar, insistiendo en las fórmulas en masculino en tono burlesco ante la bronca de la representante del PSPV-PSOE en la Mesa de las Corts Valencianes. “Señora presidente, señora presidenta, muchas gracias, Presidencia, cualquiera está permitido”, ha replicado el diputado de Vox, que ha insistido en que se encontraba en su derecho de referirse a ell

La pieza separada Kitchen es como un baúl interminable de pruebas para saber cómo funcionaba la brigada política del Ministerio del Interior en época del gobierno del PP de Mariano Rajoy. Sobre todo, para poder distinguir a quienes eran los responsables. Y hay un pliego de documentos, audios y chats que apuntan a la ex secretaria general del PP y ex ministra de Defensa, Dolores de Cospedal , como la gran arquitecta universal de las grandes operaciones clandestinas e ilegales de la policía patriótica...

Feijóo llegó a Madrid como el Señor Lobo llegó a aquel garaje de Pulp Fiction: a toda hostia y preguntando qué cojones había pasado. Pues mire usted, que tenemos en el maletero el fiambre de Pablo Casado, un tiro mal dado en la cabeza, cosas que pasan, y como comprenderá no podemos ir por ahí con sesos pegados a los cristales a un año de las elecciones. Tranquilidad, que para eso estoy yo aquí, dijo el Señor Lobo gallego.

Encuesta en Telemadrid: ¿Cree que existe una conspiración real de "señores con puros que se juntan" para derrocar al gobierno de Sánchez?. ¡Participa!

Al expresidente Felipe González no le «suena bien» la nueva Ley de Memoria Democrática. Lo ha advertido después que el PSOE y Bildu aprobaran ayer en el Congreso la enmienda que permitirá investigar la actividad de los GAL durante su primer gobierno. González no ha querido ir más allá y ha subrayado que aún no ha leído el texto. «No lo he visto, cuando lo vea les diré, pero sonarme, no me suena bien», ha sido su declaración.

Hay mujeres que disputan el poder y el privilegio, las armas y las muertas, y el mapa de las relaciones internacionales de los últimos 50 años no se entendería sin Albright, Nuland o Clinton. Puede que el feminismo haya sido y sea, el más valiente movimiento político organizado contra el conflicto armado y por la paz. Pero todas las guerras tienen señoras. Víctimas, heroínas, genocidas, titanas y tiranas. Y para quienes tenemos fascinación con las villanas, incluso desde la más profunda de las repulsiones, conviene nombrarlas y conocelas.

La jueza dio la razón a la sede episcopal y el ayuntamiento ha recurrido la sentencia. También ha llevado su reivindicación a las calles, con protestas y el lema “Lo que ha pagado el pueblo, que sea para el pueblo”

Africa tiene más dictadores per capita que cualquier otro continente. Aquí esta la lista de los que estan acusados de crimenes de guerra segun la convención de Genova. Cada uno de los individuos de esta lista ha conseguido evadir a justicia.

Cada trama de corrupción política tiene su X, su autorizador, su responsable máximo, su mayor beneficiado/a pero también, el más perjudicado si se llegara hasta el final de las investigaciones o de las responsabilidades políticas... En España, en la alta política (un decir), tenemos varios. El más popular de nuestros señores X fue el del primer Gobierno socialista del postfranquismo, cuando se prácticó el terrorismo de Estado para acabar con ETA mediante la creación de los Grupos Antiterroristas de Liberación (GAL).

Desde el inicio de la crisis sanitaria desatada por el coronavirus, e incluso antes, se intensificaron los ataques contra la presidenta madrileña. El efecto ha sido el contrario