El histórico debate de esta noche siembre el pánico entre los demócratas cuando aún faltan más de cuatro meses para las elecciones presidenciales. Un Joe Biden difuso, a ratos titubeante, se ha visto arrasado por un Donald Trump envalentonado, que ha enarbolado bulos sin pudor alguno para golpear una y otra vez a su rival. La sensación es que el presidente no ha logrado trasladar con fuerza su mensaje a los votantes y se ha visto incapaz de desmontar sus mentiras de su rival, al punto de que algunos ya cuestionan que deba seguir siendo el cand

La falta de compromiso por parte de PP y Junts per Catalunya ha privado a los ciudadanos de un foro crucial para comprender las propuestas y evaluar las alternativas políticas en un momento crítico para el futuro de Cataluña

La gestión de la sequía protagoniza el primer tramo del debate. El candidato del PP, Alejandro Fernández, no solo ha responsabilizado al actual president, Pere Aragonès, de los problemas con la gestión del agua, sino también a Salvador Illa (PSC) por los gobiernos del tripartito. “No tienen ni idea de gestionar el agua. Yo tampoco, pero al menos lo reconozco”, ha lanzado Fernández a ambos candidatos.

La reflexión que Pedro Sánchez ha puesto sobre la mesa, como no se transforme en medidas concretas quedará en una carta a los Reyes Magos. La prueba es que no han tardado ni una hora en volver a los bulos y las barbaridades.

Esa estrategia de «miente que algo queda» o que «una mentira repetida muchas veces se termina convirtiendo en verdad» acaba funcionando por diferentes motivos. El principal es que los ciudadanos son, en su gran mayoría, analfabetos en muchos aspectos porque en España la formación sobre cómo funciona el sistema democrático es nula. Por ejemplo, cuando un partido presenta un proyecto de ley en el Congreso, la gran mayoría de la gente se piensa que eso ya está aprobado. Lo mismo que cuando el gobierno aprueba un real decreto.

El PSOE se ha personado en el caso de la imputación de Alberto González Amador, pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid, citada a declarar el próximo 20 de mayo, tras las acciones legales emprendidas por la Fiscalía de Madrid. El grupo parlamentario socialista, que argumenta su decisión en que se trata de “una causa de interés general de los ciudadanos”, también ha forzado el voto de una moción en el Senado esta semana para condenar los ataques a la libertad de prensa “por parte de responsables públicos del Gobierno de la Comunidad de

Pese a que repitieron una y otra vez que “el PP no se esconde y va a donde lo invitan”, “el PP estará en todos los debates” o “el PP no se esconde en ningún caso”, después del fiasco del debate en TVG los conservadores dejaron de marear la perdiz y, tras varias semanas negándose a confirmar, dieron finalmente un no rotundo a la corporación estatal. Esta vez, no sólo no iría Alfonso Rueda -que ya no acudió a la Cadena SER, donde lo sustituyó el portavoz parlamentario, Alberto Pazos-, sino que no enviarían a ningún representante

La presidenta presume de que el 86% de los madrileños califica como buena o muy buena la atención de su médico en una encuesta de Sanidad a nivel nacional, pero oculta que la atención primaria de Madrid recibe la penúltima peor nota de España

Íñigo Errejón ha dejado una reflexión sobre las protestas en el campo y la forma en la que la derecha trata de instrumentalizarlas. "Frente a las políticas cortoplacistas que dicen que hay que elegir entre hacer frente a la crisis climática o proteger al sector agrícola, tenemos que tener políticas integrales. Eso no pasa por reducir las exigencias respecto a los pesticidas, (…) sino por evitar la competencia desleal de productos que vienen de fuera en los que sí se han empleado muchos pesticidas".

Los políticos están potenciando el sustantivo desvergüenza; olvidan que, en su primera acepción, es insolencia o atrevimiento, dos cuestiones que, dependiendo del prisma con el que se mire, bien podrían ser un halago.

En el dinámico tablero de la política española, Partido Popular (PP) y VOX han enfrentado una dura lección: ganar en las encuestas y «tomar» las calles no garantiza automáticamente el éxito en las urnas. La importancia de una mayoría parlamentaria, un principio básico en nuestro sistema democrático, parece haber sido subestimada. Como bien sabemos, la clave del poder ejecutivo radica en la capacidad de formar una mayoría estable en el Congreso. Esta es una lección fundamental, no solo para los políticos, sino para todos los ciudadanos