En el mundo de la física, la segunda ley de la termodinámica nos enseña que en un sistema aislado, la entropía no puede disminuir. Dicho de manera simple, las cosas tienden naturalmente al desorden y al equilibrio. Curiosamente, esta ley sirve como analogía en economía para ayudar a explicar ciertos fenómenos, especialmente cuando hablamos de intervenciones en el mercado como el control de alquileres. Imaginen un mercado inmobiliario como un sistema termodinámico: los precios, la oferta y la demanda fluctúan libremente, buscando su propio equil