Hoy, con pesar, debemos denunciar los acontecimientos del 7 y 8 de enero de 2024. Nos enfrentamos a una situación injusta y muy desagradable, impropia de nuestros principios y métodos colectivos: Hemos tenido conocimiento de que un grupo escindido de la Juventud Comunista, con ex dirigentes y ex empleados a la cabeza, ahora organizados en el “Movimiento Socialista”, ha asaltado violentamente una de las sedes de la Unión de Juventudes Comunistas del Partido en nuestro barrio, que contiene además gran parte del archivo histórico

El nuevo partido Sumar, liderado por Yolanda Díaz, ha dejado bien claro este sábado el portazo a Irene Montero y asimismo ha resaltado una cláusula concreta en la nueva formación para evitar escisiones de alguno de los partidos integrantes. El acuerdo de coalición entre Sumar y el resto de fuerzas de izquierda incluye de este modo una cláusula con el compromiso de que todos los diputados electos formen parte de un único grupo parlamentario, lo que impide pasarse al grupo mixto o intentar constituir otros grupos parlamentarios.

Análisis crítico en torno al surgimiento de corrientes y escisiones de carácter ortodoxo, maximilista e incluso reaccionario en el seno de la izquierda política. Se plantean posibles causas al fenómeno, se crítica lo limitado de sus planteamientos y discursos, y se propone cierta actitud que pueda dar impulso a un movimiento progresista que ha venido debilitándose desde el auge del 15M (y movimientos análogos).

El informe policial en base al que han sido arrestados los jóvenes toma como punto de partida una desconocida "escisión de ETA", con edades comprendidas entre los 20 y 25 años.

Interesante reflexión sobre los movimientos en Podemos durante los últimos años. ”El llamado espacio del cambio ha sido presa del mismo individualismo neoliberal, modelo Silicon Valley, que sus políticas combaten, y el caso andaluz solo es el último eslabón de la cadena”