Mariña Patrimonio (MP) y la Asociación Ecologista de Galicia (Adega) afirmaron este jueves que el Castro da Trinidade, en Mondoñedo, disponía de "al menos seis informes que confirman su existencia", por lo que instan al Servicio de Patrimonio de Lugo a "explicar" el motivo "intentó eliminar" el sitio de la lista en 2016.

La mesa electoral lo anuló durante el recuento, pero los populares no están de acuerdo: el sobre contenía la papeleta de la lista encabezada por Candia y ...

Las fotocopias muestran una fotografía antigua de Pasqual Maragall en primer plano y otra reciente de Ernest Maragall junto a la frase "Fuera el Alzhéimer de Barcelona" repetida con varias tipografías. Los locales del partido dónde han aparecido los carteles son la sede nacional en la calle Calàbria, la sede de la federación barcelonesa del partido en Consell de Cent y el casal del Eixample en la calle Villarroel. También han aparecido carteles del mismo tipo en unos árboles del barrio de les Corts y en un semáforo de plaza Catalunya junto...

El juez Castro a Cintora: “De nuestros enemigos no sé cuáles son peores. Yo he tenido enfrente a políticos pelotas, fiscalía, CNI, Agencia Tributaria… pero tú has tenido un enemigo más traicionero, tú has tenido a enemigos que estaban en tu propio entorno, detrás o al lado, y frente a esos es muy difícil defenderse. Te admiro, me ha encantado tu libro. En España hay muchas cosas que depurar que no se depuraron en la Transición. Leo el libro, muy bien documentado e investigado, y pienso en cuántos expedientes se podrían abrir”

Lo que veo más es una radicalización de la derecha en sus agendas, en su discurso, y en el tipo de identidad política, social, y en algunos casos racial, que se va construyendo alrededor de esa radicalización. ¿Cuál sería la contraparte de izquierda que justificaría hablar de polarización, que implique un mismo nivel de radicalización y de confrontatividad? ¿La Cámpora? ¿Cristina Kirchner? Que son, en el mejor de los casos, movimientos que han impulsado diagnósticos más o menos radicales para el desarrollo de políticas extremadamete moderadas.

El riojano Ernesto Sarabia, de 70 años, es un entusiasta del balonmano. De hecho, fue jugador y entrenador de este deporte durante muchos años. También es activista de la Memoria Histórica. No se pierde los mundiales ni los campeonatos de Europa de este deporte y ha viajado animando al equipo español por muchos países. Su costumbre, desde 2005, de llevar la bandera republicana a los partidos en los que juega España, "porque es la bandera que me representa", jamás le ha traído problemas salvo en dos lugares: España y Eslovaquia.