"Las renovables y otros generadores inframarginales, como la nuclear, se remunerarían a través de contactos diferenciados, independientemente del coste marginal" de generación de la electricidad, plantea el esperado 'non paper' del ejecutivo comunitario. Es decir, el precio se fijaría al margen de lo que cueste la fuente de energía más cara que entre en el mercado, lo que en estos momentos quiere decir el gas y el carbón. "El precio de estos contratos se establecería en general mediante concursos e iría en función de los costes reales"