Todo ese proceso que, en tres años y medio, ha blanqueado y legitimado a la ultraderecha española, ha estado avalado por un importante respaldo mediático que equipara a Vox con Unidas Podemos, justifica los acuerdos de PP y Ciudadanos con Vox frente a un Gobierno progresista que esas centrales de la prensa más conservadora han considerado siempre ilegítimo, o que, por ejemplo, ha llevado a Santiago Abascal a alternar estudios de radio o a “divertirse” en el programa estrella del 'prime time' televisivo.

Julián Macías Tovar explica por qué la extrema derecha consigue tanta visibilidad en buscadores como Google y Bing, y en portales como Facebook, además de cómo se administra esta capacidad para tapar noticias favorables al gobierno y desfavorables para la oposición.

De pie tras un atril, recta, con un atisbo de sonrisa, traje chaqueta negro que podía parecer un uniforme, a la oradora solo le faltaban birrete y toga para ofrecer la imagen perfecta de la alumna más aplicada pronunciando un discurso en el día de la graduación de un colegio americano. Una imagen tan digna es, sin duda, de lo más adecuado para dar a conocer al mundo a la presidenta de la capital de España, me dije mientras visualizaba el vídeo del acto. Solo sus enemigos políticos y los criticones que critican todo lo criticable criticarían...

Pregunta a Rufián: ¿Condena la vioIencia de los independentistas a la policía? Respuesta: "No participamos de burbujas mediáticas"

Acabo de escuchar en el Telediario de TVE que "Picasso pintó el Guernica como símbolo de la reconciliación en España". Me corto las venas

Podemos tiene que asumir que no puede ir a misa y repicar campanas. Uno de los frentes que el partido tiene abierto es la denuncia de las malas prácticas que abundan en el periodismo español. El juego sucio de la casta mediática está fuera de toda discusión. Ahora bien, si este es tu discurso, entonces la respuesta no tendría que ser promover un OK Diario, pero afín a tus siglas. La Última Hora es un panfleto que mina, por contradicción, cualquier intento de los lilas para racionalizar el panorama mediático español desde la política.

Desde el día que convocó elecciones, Isabel Díaz Ayuso propuso un marco trumpista para arrasar la campaña y en la campaña: ese “Socialismo o libertad” que reformuló con el definitivo “Comunismo o libertad”. Porque había sucedido mejor de lo previsto. Ella y su equipo se apresaron a radicalizar el primer frame cuando obtuvieron la réplica efectista y demagógica que necesitaban para apuntalar su estrategia divisiva: la consigna “Democracia o fascismo” lanzada por Pablo Iglesias. La antagonización estaba servida. Entre uno y otro extremo, propulsa

El barómetro del CIS da la mayoría para la izquierda, logrando los 70 escaños, uno por encima de la frontera que limita la absoluta. En este panorama, donde la victoria de la derecha, concretamente de Ayuso y de Vox, no se dibuja tan clara, los portavoces mediáticos afines a la derecha y ultraderecha empiezan a dudar de lo que se pueda producir. Uno de ellos es Federico Jiménez Loasantos, quien en su programa en esRadio ha llegado a asegurar que se podría producir “lo mismo” que en Venezuela y en Estados Unidos con los resultados electorales.

El mediático presidente de El Salvador causa furor en el país centroamericano mientras la comunidad internacional observa con cautela un fenómeno que carece de manual. Todo indica que su partido arrasará en las elecciones legislativas del domingo lo que le permitirá controlar los poderes Legislativo y Judicial y reformar la Constitución

Seis años ya del crimen del perro Excalibur y los responsables del sacrificio siguen en la calle. A modo de homenaje recordemos aquellos momentos de dureza extrema que nos tocó vivir.