Macrogranjas, Mar Menor, Garzón

Como nacido hace unos cincuenta años en la Comarca del Campo de Cartagena, y como hijo de agricultor/ganadero, paso a (intentar) resumir lo que está pasando con el tema macrogranjas y, más concretamente, en esta zona en la que la ganadería y la agricultura han tenido su auge, crecimiento, especulación, peces grandes que se comen al pequeño, y finalmente una época actual llena de incertidumbre.

 

La llegada del porcino vino poco a poco desde los sesenta. En aquellos años generalmente las granjas eran bastante más pequeñas que las actuales y el modelo de negocio bastante distinto. Los ganaderos eran propietarios del ganado y podían tener un molino para hacer el pienso o comprarlo a alguien que tuviese molino.

Luego se vendían a mataderos, incluso a particulares, etc. Recordar que antes era algo normal la matanza del cerdo para abastecer de embutido para varios meses.

Pero cuando hay negocio, van apareciendo otros actores, cosa normal. Empezaron a aparecer fábricas de pienso. En esta zona hay bastantes, y normalmente su envergadura es grande. Quedan molinos de particulares o de empresas de engorde medianas, pero no es lo usual.

 

Bien, pues a través de estas empresas de pienso es como se va llegando al modelo actual, que se denomina "integración", consistente en que la empresa matriz (sea fabricante de pienso o matadero tipo El Pozo) dispone de todo lo necesario para el engorde y paga un precio por cada animal engordado. Un precio de referencia máximo suele ser 12 euros/animal. El granjero (autónomo, of course) pone la mano de obra, las instalaciones, y los gastos que conlleva la crianza.

 

Por resumir; cada año, más granjas, más competencia, precios más ajustados y de últimas la nueva Ley del Mar Menor que conlleva una gran incertidumbre respecto al tratamiento de los purines. Como mínimo hay que hacer más inversiones y el gasto se dispara, especialmente para los pequeños granjeros.

Decir que las empresas que hacen este modelo de negocio tambien tienen sus propias granjas, y en muchos casos macrogranjas, por ser más rentables para ellos y porque tienen músculo financiero, obviously.

 

Por tanto, en mi zona no es que la gente defienda las macrogranjas, es que dependen de esas empresas para vivir, por eso están que trinan con Garzón y los bulos que salieron el otro día. Y porque esto es zona Vox, todo hay que decirlo.

A mi me quedan tres meses para cerrar el kiosko. Granja antígua, pequeña y con gastos inasumibles con la nueva ley. No me duele porque ya es un negocio sin futuro, pero sí me cabrea que las Macrogranjas son las que nos dan mala imagen (y con razón) pero los perjudicados somos los pequeños.

 

PD: he ido al trazo grueso, es todo un poco más complejo, pero no quería hacerlo muy largo.