No cabe duda que ciertas personas tienen suerte y mucha. Por ejemplo este jubilado neoyorkino que quiso invertir su dinero de una manera inteligente y decidió comprar una finca de unas cuantas hectáreas en Portugal.El terreno de varias hectáreas tenía una enorme nave industrial en medio del mismo. El lugar llevaba deshabitado 15 años, ya que el propietario y su esposa habían fallecido sin dejar herederos. Cuando derribó las puertas de la nave descubrió algo que nunca sospecharía.

Viejo estilo de hacer carteles artísticos

Antes de la llegada de las campañas de marketing a nivel mundial, antes de los anuncios de televisión y la publicidad en medios sociales, antes de todo esto, la publicidad y la imagen de marca se reducían prácticamente a un único elemento: el logotipo.

En aquella época el concepto en las discotecas consistía en 2 bloques que iban alternando durante la sesión, uno de baile donde se escuchaban y bailaban ritmos negros, con una fuerte base de funky y disco, y otro bloque de música lenta para que las parejas o pretendientes sacaran a bailar a sus posibles conquistas. A fin de cuentas, de lo que se trataba con esta sección de baile lento, era un acercamiento más carnal a la parienta o pariente...

El Museo de Bellas Artes de Atlanta, en Estados Unidos, acoge estos días una maravillosa exposición que reúne algunos de los mas increíbles Concept Cars de los últimos 80 años. Los vehículos que muestra son solo prototipos salidos de la mente de los diseñadores automovilísticos, pero muchos de ellos son la imagen perfecta de cómo serían los coches en un pasado alternativo, o en un futuro lejano.

Los que hicieron estas fotos es imposible que hubieran imaginado la importancia histórica que iban a tener y lo que te impactarían a ti y a mi.

Juego de Tronos” es una saga de fantasía, correcto… pero ¿hasta qué punto está inspirada en hechos reales? En esta guía trazamos los paralelismos que existen entre la historia antigua y medieval y los acontecimientos narrados por George R. R. Martin en las 5.000 páginas de su novela.

Tras tanto tiempo 'buceando' en las aguas marinas el mensaje se había hecho poco legible. Sin embargo, al estudiarlo, los expertos lograron establecer quién era el remitente y localizaron a una pariente: la berlinesa Angela Erdmann, de 62 años. "No puedo contener las lágrimas", dijo Erdmann cuando le llevaron el hallazgo a su casa: la mujer nunca conoció a su abuelo, que murió en 1946 con 54 años de edad.