Ignacio Garriga (Malcolm McCarthy) y Jorge Buxadé (Xavi Espinosa) han ido a pescar votos de Ciudadanos, pero descubrirán que los votantes están golpeando el anzuelo de Salvador Illa (Queco Novell) y Alejandro Fernández (Toni Albà).

Pagar por trabajar, esa es la política que ha impuesto Pedro Sánchez en los últimos tiempos. Tal y como denunció el diputado de Vox, José María Figaredo, en el Congreso de los Diputados esta semana: “un español que hoy perciba el SMI, paga a Hacienda y al Estado 640.832 euros, por lo que acaba perdiendo 624.956 euros”.

Tras comprobar en el último barómetro del 40db que Vox se ha consolidado como tercera fuerza política en España, Yolanda Díaz ha propuesto una alianza entre Sumar y el partido de extrema derecha para no tener que depender de Podemos. “Separarnos de Podemos nos ha perjudicado, claramente nuestros votantes nos están diciendo que nos aliemos con otra fuerza”, ha razonado Yolanda Díaz.

Ciertamente, se veía venir. Ojito al recorrido: fue maoísta de joven, después pasó por el PSOE, el PP, Ciudadanos y ahora a Vox. Como Cholo Simeone, partido a partido (que fuera hace mucho frío).

Abascal (Noé Blancafort) i Ortega-Smith (Albert Mèlich) nos presentan su propia versión de las bambas de Trump: Les New Falange.

Vox ha votado ‘no’ a la reforma del artículo 49 de la Constitución para eliminar la palabra “disminuido” y formular una nueva redacción que aborde los derechos de las “personas con discapacidad” porque, según ellos, lo que se busca es “quitarle visibilidad de las personas de ultraderecha”.

En la sede de VOX, Santiago Abascal (Noé Blancafort), Jorge Buxadé (Xavi Espinosa) y Javier Ortega Smith (Albert Mèlich) miran un capítulo de Titó y deciden crear su propio personaje infantil para españolizar a los niños: el Pacó. Un programa en el que Franco (Manel Lucas) enseñará a los niños catalanes los fundamentos de su pensamiento político.

PP y VOX. Encuentre las diferencias. Viñeta de Eneko.

Nada bueno podía salir si juntas a la ultraderecha con la inteligencia artificial.

En la sede de Vox deciden crear su propio anuncio de perfume

PP y Vox ya han llegado al nivel de botellón indefinido de borregos poligoneros mamados en Ferraz a propósito de la amnistía mientras ni se enteran de que les están parodiando. MADRE MÍA QUÉ BOCHORNO

"La huelga general es un precioso homenaje a Abascal, que lleva en huelga desde que agotó las prórrogas de la mili"

La deriva de VOX ha llevado al partido de Abascal a una encrucijada. La dirección ha decidido contratar al cantante Manu Chao para sus jornadas de Coaching en las oficinas De Padre Damián, 33 en las que el Teambuilding jugará un papel primordial de cara estrechar lazos entre las divergentes tendencias ultras que intenta abarcar el partido. .

Ha tenido lugar en el primer pleno con lenguas cooficiales en el Congreso.

A los de Vox les gusta más el show que a un domador del Circo Mundial. En lugar de ligres tienen a Abascal y al sobrino de Rato, pero por lo demás lo del espectáculo es parecido. Poner banderas descomunales, boicotear minutos de silencio, hacer el ridículo en Europa… Es ver a un ultraderechista en un lugar público y el cuerpo te pide sacar las palomitas para ver qué montan esta vez.

El Congreso pone en marcha el uso de las lenguas oficiales entre las protestas del PP y el plante de Vox

"¡¡EEEEHHHHHHHHH!!", han dicho en su idioma. “¡No puede ser que no se nos deje expresarnos en el que es nuestro idioma legítimo! ¡basta ya! ¡¿el catalán sí y el grito no!? ¡doble rasero!”, protestaba un diputado de vox en su idioma. “Hay muchas lenguas que deberían ser más oficiales que el catalán, como por ejemplo el grito o el idioma de las hostias, que también lo hablamos muy bien”. También han lamentado no saber alemán y que este idioma no esté recogido en el reglamento ni en la Constitución, pues creen que es su verdadera lengua.