Scarface: El precio del poder se estrenó en diciembre de 1983, hace ahora poco más de 40 años. Hoy cuesta creerlo, pero llegó a las salas estadounidenses, en plena campaña navideña, precedida de augurios funestos y de una feroz campaña de descrédito que estuvo a punto de lastrar sus expectativas comerciales. Su distribuidora, Universal, llegó a considerarla un estreno de muy alto riesgo financiero: partía de un presupuesto inicial de 12 millones de dólares y había acabado costando el doble o el triple (las versiones difieren).

Ruben Östlund empezó en el cine haciendo películas de esquí. Más tarde, y gracias a ellas, entró en la escuela de cine de Suecia y ahora es, sin duda alguna, uno de los autores más importantes del cine europeo (aunque parece que el mercado americano se le resiste un poco más). A sus cincuenta y dos años ya tiene a sus espaldas seis largometrajes de ficción. Sus dos últimos han recibido el gran premio de la Palma de Oro de Cannes y, Fuerza mayor, el cuarto, el de Un Certain Regard del mismo festival.

Después de muchas investigaciones, y tras analizar detenidamente las cámaras de seguridad de la zona, expertos geólogos han concluido que una colilla mal apagada en una cuneta originó el volcán de La Palma. “Pasó de ser una montaña normal y corriente a una bola de fuego que expulsa lava y ceniza”, aseguran. “Creemos que se trataba de una colilla de Ducados”, precisan los especialistas.

A esta familia le parece tercermundista tener que estar pendiente de si un volcán destruye sus pertenencias. “Me parece increíble que en pleno 2021 sigan pasando estas cosas en España”, se sincera Cayetana Sesma Agaj, de 16 años. “Cómo le explico yo a mis hijos pequeños que hay un volcán acercándose a su habitación”, pregunta la madre. “Espero que la Comunidad de Madrid o el Ayuntamiento hagan algo porque, si tenemos que esperar al Gobierno, lo tenemos crudo”, expresa el padre.

La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, ha querido lanzar un mensaje de tranquilidad tras la erupción del volcán de La Palma, cuya lava se espera que llegue al mar sobre las ocho de la tarde de hoy. Ha insistido esta mañana en que el suceso es un «espectáculo maravilloso» que, lejos de asustar, debería verse como una oportunidad única y un reclamo. Tanto es así que ella misma ha anunciado su intención de bañarse en el propio volcán para dar ejemplo y demostrar que, «con prudencia», es posible disfrutar de la lava.