El muro de Adriano, el muro más grande que levantaron los romanos en Europa, resistió durante siglos las invasiones de las belicosas tribus de los pictos y de los escotos provenientes de Irlanda. Resistió también a casi 2.000 años de lluvias, torrentes y movimientos sísmicos, pero lo que no ha podido resistir es a la avalancha de la “horda dorada”, los miles de turistas y seguidores de 'Juego de Tronos', que se encaraman cada día a la vetusta pared para hacerse el 'selfie' perfecto.