Salpimienta la carne troceada y ponla en un bol. Añade 4 dientes de ajo machacados y con piel, agrega las hojas de laurel, la rama de romero, y vierte el vino. Déjala macerando desde la víspera. Retira la carne del bol y escúrrela bien (reserva el caldo). Seca y pasa la carne por harina. Fríela brevemente en una sartén con aceite. Retira (no hay que ponerla sobre papel de cocina porque absorbe el jugo de la carne) y resérvala