Los canarios son unas personas listas y hermosas y formidables. Quizá sea por los bellos paisajes de las islas, por su delicioso clima tropical o por tener los relojes con la hora exacta, no como nosotros los peninsulares, que vamos con una hora de adelanto y así llegamos siempre a las citas demasiado pronto, cosa que está muy fea. Lo han adivinado: escribo este artículo por orden de los capos.