Estos 3 padres quisieron vivir en primera persona, y en la medida de lo posible, la experiencia del embarazo. Llevaron durante un mes tres grandes barrigas de 15 kilos de peso, con las que experimentar las mismas dificultades espaciales o laborales y molestias en el sueño, descanso y rutinas diarias de cualquier madre. El objetivo era el de ponerse en su piel y comprenderlas mejor para poder cuidarlas también mejor.