Pueblo es una palabra española que significa gente, ciudad, villa. Sin embargo, en Arizona, Nuevo México y zonas adyacentes la palabra se refiere específicamente a los asentamientos amontonados de casas aterrazadas de las razas Hopi y Zuni que viven allí. Las viviendas unifamiliares en un pueblo son como enormes bloques de adobe amontonados unos con otros. Kramer, su autor busca criticar las construcciones españolas y los pueblos españoles, con este juego y dar a conocer las malas prácticas de los constructores españoles.

Los constructores son meeples que puedes añadir a cualquier camino o ciudad que tengas en construcción y te permite jugar un turno adicional cuando añadas alguna loseta a la ciudad o camino en el que se encuentre. La parte de comerciantes está representada en las ciudades como símbolos de distintos bienes (tela, vino y maíz) el jugador que cierre una ciudad que contenga estos símbolos se llevará tantas fichas de bienes como haya en la ciudad recién cerrada.

El proyecto de interiorismo de la vivienda de Zamora fue realmente complicado. Eme tenía un sueño: comprar una casa en el pueblo de su madre (San Pedro de Ceque) para estar cerca de ella y cuidarla. Con los ahorros de toda una vida, compraron una casa vieja. Como no había dinero para la reforma, sus hijos le dejaron el resto. Querían una casa familiar y asequible en la que pudieran estar todos cuando coincidieran de modo funcional y aprovechable. Querían poder reunirse el matrimonio, sus dos hijos, Alberto y Víctor, y la abuela.

Y por fín: el constructor de campo.