Si bien a simple vista un búfalo puede llegar a resultar una elección un tanto singular como montura para una fuerza policial, estos animales de tiro poseen una excelente habilidad natural para cruzar los ríos y territorios pantanosos que rodean a las pequeñas ciudades y pueblos desparramadas por la isla de Marajó en Pará, estado en el norte de Brasil. Razón por la cual estos bovinos se han vuelto los mejores aliados de la policía militar de la zona a la hora de realizar las patrullas por una región repleta de pantanos.

Nzou, de 46 años, ha vivido en una reserva de vida silvestre en Zimbabwe desde que sus padres murieron en la década de 1970. Nzou no responde a los otros elefantes de la reserva - tal vez ya no entiende lo que están diciendo. Ella es feliz con su rebaño inusual y, siempre y cuando acepten que es su líder, ella está contenta de ser su matriarca. Nzou y su manada de búfalos tienen su propia manera de comunicar - ellos entienden sus estruendos y ella, a su vez, puede comprender sus sonidos