11 de agosto de 1984 [..] Reagan solía grabar un discurso semanal para la radio pública[..] El discurso escrito que debía leer empezaba: “Compatriotas, me complace anunciarles que hoy firmé la ley que permitirá a los grupos de estudiantes religiosos…”. Antes de grabarlo, con los micrófonos encendidos y las grabadoras en marcha, los técnicos pidieron a Reagan una prueba de sonido. Y el presidente dijo: “Compatriotas, me complace anunciarles que hoy firmé la ley que proscribirá a Rusia para siempre. Comenzaremos el bombardeo en cinco minutos".