La gran popularidad de Rosa María Sardà le llegó en la televisión, donde comenzó a trabajar en 1969, en Hora Once, que se emitía en La 2 de TVE. Desde entonces compaginó la tele con el teatro, tanto en Madrid como en Barcelona, y siempre con éxito.Igual que en el cine, donde debutó en 1980. Su programa Ahí te quiero ver (1984-1987) es uno de los grandes clásicos del humor televisivo y fue uno de los primeros espacios que combinaba las entrevistas con las actuaciones musicales y los sketches de humor.

Todo iba bien hasta la supuesta pregunta de una tal Rosa Melano, que, leído con sorna, es Rózame el ano. Sin embargo, los ponentes no se dieron ni cuenta de la cuestión, con el consiguiente cachondeo al viralizarse el vídeo. Por si no lo saben, este fue uno de los grandes troleos que ha sufrido nunca el futbolista del Manchester City Kun Agüero

Si les hablamos de Rosa Melano y de Elber Galarga quizá no les suenen. Pero si son asiduos a las redes sociales, enseguida les vendrá a la cabeza alguna que otra broma gracias a los dichosos nombres que han hecho las delicias de más de un internauta aunque hayan dejado alguna que otra víctima por el camino. Ayer, estos dos nombres propios, aparentemente reales pero en realidad ficficios, volvieron a ser tendencia en Twitter por cobrarse una nueva víctima.

La presentadora del programa, Ana Hernández, no cayó en la cuenta de que se trataba de una broma y preguntó a los participantes de la ponencia atribuyendo estos nombres.

La Presidenta de RTVE ha remarcado que se ha tratado de un lapsus durante la lectura del escrito en el que rendía cuentas de la dirección de RTVE.

Viñeta de Terán para El Jueves.

Tweet de Antonio Maestre.

Viñeta de Maribel Carod para El Jueves.

Puestos a recordar efemérides, muchos nos olvidan la curiosa relación de la política Rosa Díez con el grupos estadounidense Manowar. Hace cuatro años que hizo su primera referencia a la banda de DeMaio, Adams y compañía, coincidiendo con el día del trabajador.

La periodista lleva décadas en la televisión nacional como presentadora de grandes formatos, pero empezó como becaria en Radio Nacional: «Nunca pensé en trabajar en la tele»

El último zasca se lo ha llevado la fundadora de UPyD a raíz de un extemporáneo tuit en el que afloran una vez más las obsesiones de Rosa Díez, inasequible al desaliento y a las pandemias: «Lo voy a decir: mientras los españoles enterramos a nuestros muertos Sánchez desentierra las dos Españas. Esto no puede seguir así».

Isabel Preysler, Isabel Pantoja, María Teresa Campos y Rocío Jurado han sido, y todavía son, noticia rosa obligatoria desde hace décadas. Su personalidad es tan arrolladora que han creado dinastías que generación tras generación han acaparado la atención mediática. Hijos, nietos y sobrinos son famosos 'por contagio'. El compartir apellido con las grandes protagonistas de lo rosa les ha convertido en personajes en sí mismos.

“Es como si su sangre hubiera comenzado a hervir y toda la bilis de su hígado se hubiese transformado en lava", lee el informe médico.

Es un buen momento para pasarse por el Twitter de Rosa Díez y deleitarse con sus reacciones al anuncio de pacto entre PSOE y Podemos.

Inglaterra inaugura el Nuevo Orden Oval. Con un despliegue demoledor y una estrategia inteligente ha eliminado a Nueva Zelanda (19-7) del Mundial de Rugby de Japón y se planta con serias aspiraciones en la final

Venganza en plato frío, tuvo que exclamar el matador cuando se enteró por medio de terceros de la que se estaba organizando a sus espaldas y sin previo aviso... Sangre de su sangre además.

El amor parece ser la asignatura pendiente de la eurovisiva, que reconoce que ser famosa no la ha beneficiado en absoluto en lo que respecta a su situación sentimental. La viuda de Pedro Carrasco la invitaba a conocer a un hombre de procedencia africana, ya que ella confesaba tener muy buena experiencia en el asunto. "Yo necesito contacto físico y que me empotre contra la pared", confesaba Rosa ante la atenta mirada de sus compañeros.

A nivel de audiencias, La 1 ha acabado la temporada de la peor manera posible: firmando el mes menos visto de su historia. La cadena pública anotó en junio un 8.7% de cuota media, lo que se traduce en el registro más bajo de su trayectoria, según los datos facilitados por Barlovento Comunicación. Además, supone una pérdida de 1,2 puntos con respecto a junio de 2018, cuando firmó un 9,9% de share.

Después de que Emmanuel Macron, presidente de la República Francesa, desmintiera la semana pasada que hubiese llamado a Albert Rivera para felicitarlo por los pactos alcanzados con el PP y con Vox, la prensa ha podido saber que Rosa Díez, co-fundadora de UPyD, sí lleva días llamando al líder de Ciudadanos para felicitarlo pero este no le coge el teléfono.

Casarse en la Capilla Real de la catedral de Sevilla, sin embargo, puede estar al alcance de cualquier bolsillo y cualquier persona. Sergio ha seguido el trámite rutinario, que es pedir cita un año antes, cuando se abre el libro de matrimonios, y consultar la disponibilidad. La fecha estaba libre y casarse allí, en la Capilla Real, cuesta 175 euros, incluyendo las flores que ese día decoren el altar.

Septiembre de 2057, Rosa Díez ha conquistado la República Democrática del Congo, territorio previamente ocupado por Zimbabue. La cofundadora de UPyD ya ocupa todo el planeta y la Tercera Guerra Mundial ha finalizado. Al menos según World War Bot 2020, una cuenta automática de Twitter que cuenta la evolución de una futura y ficticia guerra mundial cuya evolución siguen decenas de miles de personas.

Rosa fue operada de una vértebra cervical en 2016. Le quedó una cicatriz en forma de media luna, que quiso convertir en una pequeña obra de arte. “No era fea, pero tampoco bonita. Un amigo tatuador me sugirió transformarla (...) Cada vez más personas recurren a los tatuajes para disimular, o bien decorar, cicatrices, manchas en la piel o cualquier marca poco estética en la piel. Los tatuadores recomiendan dejar pasar al menos un año desde la operación antes de hacer un tatuaje en la cicatriz o en su piel piel circundante.

Llegamos desde Polonia, donde habíamos visitado Auschwitz, que nos pareció un horror por la gente haciéndose selfis en los hornos. Pues Chernóbil es todavía peor. En nuestro hotel se alojaba un viaje de fin de curso de chavales italianos, no pegamos ojo en toda la noche. El año que viene nos vamos a Guantánamo, a conocer el campo de detención. También va mucha gente, pero por lo menos hay playa.