La llamada generación de los 8 bit hizo que se establecieran dos bloques: Sega y Nintendo. Con ventas asimétricas, pero con juegos de calidad que nos llevó a las recreativas a casa en cualquiera de los casos. ¿Adónde nos lleva esto? Primero, en la opinión de la mayoría de los jugadores que disfrutaron la cuarta generación, fue la guerra de consolas original y la más interesante. Hoy en día el término 8-bit vende mucho entre chavales de gafas de pasta y jersey de rombos, pero ahora veremos por qué los 16 son más del doble.

No recuerdo cómo llegó a mis manos una copia de Ecco the Dolphin. Yo era más de videojuegos de puñetazos y patadas, por lo que un juego sobre un mamífero extraviado en busca de su familia habría sido poco menos que un insulto para mi cerebro infantil sediento de sangre.

Hace 19 años, todos los jugones esperaban con ansia el lanzamiento del Sonic X-treme, que sería la primera aventura tridimensional del erizo de SEGA. Tras diversos problemas en su desarrollo, fue finalmente cancelado y la Saturn se quedó sin su juego "principal" de Sonic. Hace unos meses, parte de su código fuente fue rescatado por "JollyRoger" de los archivos del último equipo que se encargaría de intentar completar el juego en su versión para PC y, tras mucho depurar código, ha podido compilar un nivel jugable de este "muy esperado" juego.

Los clásicos nunca mueren y gracias a los emuladores podemos tener los juegos que hicieron nuestra infancia más divertida en nuestro dispositivo android

Hay un personaje en la historia de los videojuegos que pese a no ser ni mucho menos relevante sí tiene un lugar reservado en la Historia, con mayúsculas. Y es que no ser relevante no le relegó a ser anecdótico, sin más. Dicen que lo importarse es diferenciarse, y SEGA lo consiguió gracias a él en la campaña publicitaria realizada en Japón entre 1997 y 1998.