En Los Ángeles, Magic lo tenía todo: un equipo competitivo, un contrato multimillonario (cinco millones de dólares por temporada, un récord en aquella época), un montón de chicas con las que acostarse cada noche, acceso privilegiado a la Mansión Playboy, y la adoración de toda una ciudad y de toda una casta, la de las estrellas de Hollywood, que se plantaban cada noche en el Forum solo para verle sonreír. Hasta que dejó de sonreír, claro. Y todo el mundo entendió que algo pasaba con el entrenador y que era algo grave (...)

Acabo de regresar de una expedición de 2 semanas por las selvas de Venezuela para hacer FPV en la cascada más alta del mundo, el Salto Ángel (979m / 3121 pies). Tenía este hermoso país en mi lista de deseos desde hace muchos años. Mis amigos y yo exploramos la selva durante días en barco, a pie, en helicóptero y con un dron para mostrarte algo único. Ahora abróchense los cinturones y disfruten del viaje por la cascada más alta del mundo.

John Draper pretendía construir un generador de tonos multifrecuencia para poder controlar el sistema telefónico de AT&T, puesto que se controlaba por tonos (al igual que el resto de sistemas de telefonía de la época). La idea era tener un sistema simple y de uso inmediato sin tener que depender de una cinta de casete con grabaciones de tonos en diferentes frecuencias. Aquí fue donde un niño ciego (Joybubbles), a la tierna edad de siete años, descubrió que silbando a ciertas frecuencias podía activar ciertas centrales de telefonía.

«No me parece adecuado». Así de contundente ha sido la reacción de Ángel Gabilondo, portavoz del PSOE en la asamblea de Madrid, tras leer esta mañana en un ejemplar viejo de El País que Isabel Díaz Ayuso planea construir un «hospital de pandemias». «Creo que hay mejores maneras de afrontar una posible segunda ola», ha agregado Gabilondo, aunque sin especificar cuáles. «Parece que va a nevar», ha añadido poco después mientras contemplaba la ciudad por la ventana de su despacho.

Desde finales de setiembre el cómico Ángel Martín presenta las noticias del día desde los que podría ser su casa, sin música ni artificios. En pocos días sus vídeos se han convertido en una píldora informativa que cientos de miles de personas se desayunan cada mañana. No con el objetivo de estar al tanto de lo que ocurre en el mundo, pero sí con el ánimo de echarse unas risas mientras Ángel Martín les resume la actualidad con gracia e ironía y con el rostro completamente serio.