El ping-pong ya tiene punto del siglo: un lance entre Ma Long y Fang Bo. El primero se hizo con la medalla de oro en el Campeonato del mundo gracias a su victoria en este intenso partido.

Parece que a los gatos les encanta el deporte más que nada en el mundo. Jugar al ping pong es una de sus actividades preferidas...

La gente pasaba a su lado, le echaba una foto y a continuación se iba a otro sitio, pero yo pensaba que allí, tras esa mirada, había mucho más. Con sólo un poco de atención por mi parte, el Orangutan comenzó a hacerme señales para jugar y que le lanzara cosas.

Comienza con una plotita y la mete en un vaso, pero allí no para y llega a meter hasta tres pelotas al mismo tiempo una en cada vaso.

Los dos golpes de este vídeo son tan inverosímiles que parecen una falsificación. Primero saca la pelota y provoca que gire en un ángulo de 90 grados y después, sin verla, consigue alcanzarla con un segundo saque. "Aunque no lo parezca", me cuenta en un intercambio de correos electrónicos, "el segundo servicio es mucho más difícil que el primero ya que la pelota gira en el aire y requiere una precisión enorme. La gracia del vídeo es conseguir los dos seguidos y sincronizarlos a pesar de no ver el tramo final de la primera pelota"...

Competidores de tenis de mesa en los Juegos de la Commonwealth muestran la intensa concentración necesaria para ser un ganador. Estas fotos tal vez dan alguna idea del porqué, en el año 1900, Rusia prohibió el deporte del ping-pong. Los médicos temían que podría dañar la vista de los jugadores. De hecho, es un deporte de juego rápido y furioso, exigiendo reacciones sobrehumanos y la capacidad temible para el enfoque. Cualquier pérdida momentánea de concentración puede costar a los jugadores valiosos puntos.

Recopilación de imágenes retocadas a partir de una foto original de Obama jugando a ping pong

Alguien quiso dejar su arte con la música con este pobre chico borracho. No hay mal que por bien no venga