La suspensión de las actividades de los 847 restaurantes que McDonald’s tiene en Rusia a causa de la invasión de las fuerzas militares de ese país a Ucrania causó un frenesí en la tierra de Vladimir Putin

El juez de Granada que ha juzgado el caso considera “hurto famélico” la conducta de la procesada, madre de cuatro hijos que no tenían nada para comer. El magistrado José Luis Ruiz Martínez, titular del Juzgado de Instrucción 9, considera acreditado durante el juicio que la señora ocultó en su bolso, la mañana del pasado día 17, las seis raciones de bonito "para procurar dicho alimento a su familia nuclear". La mujer se enfrentaba al pago de una multa, pero el juez la ha absuelto porque su conducta obedeció a la situación de precariedad…

Un bulo izquierdista convierte a un hombre famélico de Venezuela en un niño de Yemen. ¡Miserables! El hombre de la foto se llama Miguel Blanco, tiene 28 años y vive en la parroquia Coquivacoa de Maracaibo.

Desde 2016 circula en internet la foto de un tigre supuestamente famélico y víctima de maltratos en un zoológico de Venezuela. Sin embargo el animal de esta foto nunca tuvo nada que ver con el país gobernado por Nicolás Maduro. Verificamos esta imagen, y este felino no está pasando hambre en un zoológico de Venezuela. La foto fue tomada por el periodista australiano Michael Bachelard durante un reportaje realizado en Indonesia para el Sydney Morning Herald en 2013. El animal retratado, una tigresa de Sumatra, se llamaba Melani.

La prevención del hurto llega a los pasillos del súper. La cadena valenciana Mercadona ha comenzado a implantar un sistema de seguridad integral que contempla la instalación de cámaras y alarmas en sus 1.400 puntos de venta en España. Las líneas maestras de este programa fueron explicadas el pasado martes por los responsables de la división de Seguridad de la compañía.

Para personas en situación de exclusión social podría ser una forma de obtener bienes de primera necesidad, con pleno amparo legal y jurisprudencial.

¿Puede un pobre robar al rico? En este artículo se analizan los asaltos a supermercados desde un punto de vista ético y jurídico, y se compara la persecución a los jornaleros con la impunidad de los especuladores.

En España la pobreza es ya un problema de gravedad. Y cuando se protege al que tiene y se golpea al necesitado, los actos como los que han protagonizado Gordillo y sus compañeros en centros comerciales, en las provincias de Sevilla y Cádiz, no son más que una consecuencia, hasta cierto punto esperada, que difícilmente puede suscitar rechazo entre los más necesitados del momento.

El robo famélico es una figura jurídica presente en los códigos penales de algunos estados de México. Este hecho institucionaliza una situación de desigualdad que no se encuentra solo en México sino, prácticamente, en cualquier país de nuestro planeta. Esta concepción ha servido como eximente para ciudadanos mexicanos, que viéndose obligados a robar para poder comer, han tenido la fortuna de no deber responder penalmente por esos hechos que son considerados punibles.

Nada es lo que parece en Corea del Norte, ni siquiera el luto histérico por un líder que en realidad era detestado.

Encontrarse con un ave rapaz de más de cinco kilos caminando tranquilamente por la ciudad impresiona, y mucho. El joven Alberto García lo puede contar en primera persona. Se topó con una cría de buitre leonado en Badajoz, el pasado lunes. Dos días después un vecino de la localidad pacense de Oliva de la Frontera repetía la escena, aunque esta vez en un entorno un poco más rural. Estas 'apariciones' sorprendentes y anecdóticas para la mayoría de los mortales tienen una explicación muy lógica para los expertos: los animales tienen hambre.

A nuestro cerebro no se le dan muy bien las multitudes. Fue cableado cuando vivíamos en comunidades pequeñas, así que no tenía por qué asimilar la existencia de millones de habitantes. El problema es que hoy en día somos miles de millones de habitantes, y eso supone un problema. Sobre todo si queremos inspirar la filantropía. Cuando vemos un anuncio en el que se nos conmina a prestar nuestra ayuda a un país tercermundista, generalmente se nos mostrará un niño triste y famélico. Ello es lo que de verdad inspira nuestro altruismo.