Un atacante, con un poco de paciencia y habilidad, podría hacerse con el contenido de las comunicaciones de millones de personas, según han descubierto expertos en seguridad informática. Las grandes empresas de la red ya están sobre aviso y trabajan contrarreloj para solucionar el problema. Lo que han demostrado en un estudio publicado ayer, es que TLS tiene un fallo en su diseño, es decir, que no depende de la implementación que cada software o empresa haga de él, permite capturar la información cifrada en formato de texto plano.