Revlon, el icono de la cosmética estadounidense, no llegará al centenario. O sí, si encuentra comprador después de declararse en bancarrota tras acogerse a la legislación concursal del país. La compañía fundada durante la Gran Depresión por los hermanos Charles y Joseph Revson y el químico Charles Lachman,no ha evitado la suspensión de pagos. La pandemia, problemas de suministro y una deuda a largo plazo superior a los 3000 millones ha pesado como una losa en unos momentos en los que elevada inflación no ha hecho más que empeorar sus costes.