Además, han prohibido la música en estas emisoras, según recoge la agencia de noticias afgana Pajhwok.

Los insurgentes talibanes de Afganistán atacaron y tomaron una base militar clave en el sureste de la provincia de Ghazni el sábado, capturando a docenas de soldados y matando a varios otros. El último ataque se produjo el día en que Estados Unidos y sus socios de la OTAN comenzaron a retirar formalmente sus ejércitos del país tras casi 20 años de guerra.

Un hombre hace explotar un vehículo en el que viajaba en la ciudad de Ghazni, en el sur del país, cerca de una base de la policía

Un avión con 83 personas a bordo se estrelló este lunes en un área controlada por los talibanes en la provincia de Ghazni, en el este de Afganistán, sin que se sepa aún el número de víctimas ni las causas del siniestro, del que se suceden los datos contradictorios.

Un grupo de talibanes liberó hoy a 355 presos, 148 de ellos pertenecientes a grupos insurgentes, en el asalto a una cárcel en el sur de Afganistán, en el que murieron al menos tres asaltantes y cuatro miembros de las fuerzas de seguridad de la prisión. El ataque se produjo esta madrugada en la prisión central de Ghazni, capital de la provincia homónima, cuando los insurgentes detonaron un coche cargado de explosivos en la puerta principal de la penitenciaría, afirmó el portavoz del gobernador regional, Shafiq Nang.

Tras una semana de duros combates, los taliban se han hecho con el control del estratégico distrito de Ajrestan en la provincia de Ghazni. Los insurgentes mataron unos 70 civiles, 15 de ellos decapitados por ser sospechosos de colaborar con las autoridades. El enclave podría ser empleado como base para futuros ataques en las provincias orientales según los analistas. Estos hechos ocurren días antes a la toma de poder del nuevo presidente afgano Ashraf Ghani.

Tropas polacas de la Fuerza Internacional de Ayuda a la Seguridad en Afganistán (ISAF) asesinaron a cuatro civiles en la localidad de Mangura, en la provincia de Ghazni, en el oriente del país, denunciaron autoridades locales. "En el curso de la investigación se estableció que las cuatro personas asesinadas por los militares polacos eran civiles que no tenían ningún vínculo con la guerrilla", dijo el jefe de las fuerzas de seguridad afgana en Ghazni Jiyal Baza Shirzaya.

Los soldados de la coalición fueron "amenazados" por hombres armados apostados en unas casas, según el comunicado."Los soldados respondieron, matando a los insurgentes, pero también, por error, a cuatro mujeres y un niño que se encontraban con ellos", siguió la coalición, asegurando que se ha abierto una investigación.