Un joven tibetano murió el viernes en la localidad de Meruma, en la provincia china de Sichuan, tras prenderse fuego a lo bonzo en protesta por la ocupación de Tibet por China. El joven, de 24 años e identificado como Choepa, era perseguido por las autoridades chinas después de participar en enero en una manifestación contra la ocupación de Tíbet. Más de 40 tibetanos, en su mayoría monjes budistas, se han inmolado desde el año pasado en protesta por la ocupación china y a favor del regreso del Dalai Lama a Tíbet.