Lo ha diseñado una firma de lencería japonesa, y se conecta al móvil a través del 'bluetooh'. Cuenta con un sensor de ritmo cardíaco que puede pararle algo más que los pies al pretendiente no deseado

Tenía que ser en Japón. La marca de lencería Ravijour ha presentado un sujetador inteligente que, según sus creadores, sólo se puede abrir cuando su propietaria está realmente enamorada. OS recomendamos que no os perdáis el vídeo del producto.

El sujetador tiene una serie de sensores, conexión bluetooth con un smartphone con una aplicación especial para analizar el estado de “verdadera excitación” de la mujer que lo lleva puesto. Si el hombre que la está conquistando no se lo ha currado bastante como para excitar a la mujer lo suficiente el broche del sujetador no se abre…

Vídeo que muestra lo que ocurre en una nasa para cangrejos cuando se envía al fondo del mar con cebo dentro

Se cumplen 100 años de la primera patente de un sostén moderno. Elegir mal la talla puede causar dolores de espalda o rozaduras.

Si pensabas que en los laboratorios más “locos” de Microsoft solo se investigaba sobre nuevas interfaces, tecnologías para convertir cualquier superficie en algo táctil, Illumiroom para el futuro de los videojuegos o la mejora de Kinect, ¡qué equivocado estabas!

En China se expidió una insólita ley que prohíbe a las mujeres utilizar sostenes con alambre, cuando van a presentar los exámenes de admisión para aspirar a un cupo en la universidad. Dicha medida se tomó con el fin de evitar el fraude y la trampa estudiantil, que día a día se incrementa por medio de sofisticados métodos ilegales, como la utilización de herramientas de fraude electrónico.

Puede resultar un cliché, viniendo de un extranjero, hablar de jamón. Pero lo cierto es que se trata de uno de las grandes manjares de España, y ocupa un lugar especial en el corazón de muchos que visitan Madrid. Lo que yo ignoraba es que ese lugar especial sería mi puerta. Acabo de llegar a Madrid como corresponsal del Guardian, y en el segundo día de esta huelga de limpieza que está empezando a empañar la belleza de esta ciudad, descubrí una pata de jamón bien roído en mi portal.

Hace unos 3 meses que dejé de usar sujetador. No fue por nada en concreto, ni una decisión drástica feminista y rebelde como las del las hippies que lo echaban al fuego. Me gustan mis sujetadores (y a mi señor más todavía), y ahí están, guardadicos en mi cajón para las ocasiones especiales. Pero poco a poco me fui dando cuenta de que era más feliz sin él. Recuerdo aquella sensación de llegar a casa y quitarme el sujetador...

Hay sujetadores de muchos tipos, pero este en particular está diseñado para enviar actualizaciones a Twitter cada vez que su propietaria (u otra persona, que todo es posible) lo desabrocha. Lejos de querer ser un alegre testigo de aventuras de alcoba, el TweetingBra tiene un objetivo más específico: concienciar sobre el cáncer de mama.

Sujetadores que hemos conocido

El sujeto se constituye siempre imaginariamente como resultado de tramas lingüísticas y simbólicas. Falta un signo que dispute la universalidad. Uno de los puntos débiles del 15M fue que, si bien afirmaban sus integrantes enfrentarse al régimen, tenían una absurda aversión a los símbolos republicanos –como símbolos que dividen– y más de una vez expulsaron a personas que llevaban una bandera tricolor como si esta fuera un símbolo de partido y no una propuesta de universalidad democrática en absoluto reñida con el protagonismo de la multitud.

Creo que el siglo XIX en Europa produjo un tipo de autor singular que no debe ser confundido con los "grandes" autores literarios, o los autores de textos religiosos canónicos y los fundadores de las ciencias. De manera algo arbitraria, podríamos llamarlos "iniciadores de prácticas discursivas".

Finalista XI edición de Jameson Notodofilmfest

Anuncio japonés de sujetadores.

Contrario a todo lo que nos han dicho acerca de la importancia del soporte de los senos, un nuevo estudio de Jean-Denis Rouillon, de la Universidad de Besançon, en Francia, dice que hemos vivido en el engaño. Según este estudio, usar brassiere no ayuda en nada a reducir el dolor de espalda, y el soporte ofrecido por un sostén, de hecho, fomenta que se caigan.

La entrada de los EEUU en la Segunda Guerra Mundial supuso, igual que en el resto de países involucrados, el abandono de muchos puestos de trabajos de trabajo ocupados por hombres, y las mujeres tuvieron que tomar el relevo (además de las que sirvieron en la II Guerra), y para protegerse se inventó una prenda que terminó como parte del uniforme de las trabajadoras durante esa época.

La Secretaría de la Mujer de EEUU, dependiente del Departamento de Trabajo, entre las muchas decisiones que tomó “para promover el bienestar de las mujeres asalariadas, mejorar sus condiciones de trabajo, aumentar su eficiencia y promover sus oportunidades para el empleo rentable“, decidió modificar los uniformes de trabajo debibo a las diferencias físicas entre hombres y mujeres… el SAF-T-BRA, un sujetador de plástico rígido diseñado por Willson Goggles que protegía los pechos de las trabajadoras.

Alberto Ruiz-Gallardón se ha convertido en el objetivo de las críticas de los enfermos mentales. La reforma del Código Penal que ha impulsado el ministro de Justicia ha despertado la ira del colectivo porque “equipara la enfermedad mental con peligrosidad y tipifica a la persona con trastorno mental como sujeto peligroso”. Creen que “asociar trastorno mental con peligrosidad es una idea prejuiciosa”.

Llevan ya tiempo comercializándose, pero es ahora cuando han decidido a darse a conocer mediante una publicidad fuerte; el paraguas de "manos libres" ha llegado y quiere instalarse con fuerza en nuestra sociedad. Es verdad que el paraguas de toda la vida es un auténtico "engorro" y usar uno sin manos es fantástico, pero ¿es lo que necesitamos? ¿es lo suficientemente bueno para que lo adaptemos rápidamente?

Tras obligarla a bajarse del coche, le hicieron voltear los bolsillos para ver si llevaba algo en ellos y finalmente Brugger tuvo que levantarse la camiseta hasta el estómago y dar la vuelta a su sujetador dos veces para demostrar que no llevaba escondido nada en él.

Tal es la sensibilidad del detector de metales que el cierre de un sujetador lo dispara. Podría ser el dispositivo de seguridad de una cumbre de jefes de Estado, pero solo es la entrada a un edificio en los que se realizan las pruebas de Selectividad en la provincia china de Jilin. El temido 'gaokao' no es un examen cualquiera: 9,12 millones de estudiantes luchan estos días por su acceso a la universidad, y la competencia para matricularse en los mejores centros es feroz. Tanta que algunos jóvenes no la soportan y deciden quitarse la vida.

La imagen del Ejército israelí puede haberse visto perjudicada en el pasado por algún encontronazo con prisioneros palestinos o algún virulento intercambio de opiniones gubernamentales en la franja de Gaza, pero esos casos no han tenido la repercusión viral e inesperada de cuatro nalgas y un escote.

Chicas enseñando gran parte de su cuerpo es algo habitual en playas, discotecas y redes sociales. No lo es, sin embargo, cuando se trata de cuatro soldados en una base del sur de Israel. Las jóvenes, de 18 años, se fotografiaron con ropa interior minimalista y algo de uniforme militar. Como era de esperar, las chicas no tardaron en colgar la imagen en Facebook. La desenfadada fotografía en tanga y sujetador en el contexto castrense israelí ha provocado revuelo en las redes sociales despertando mucho entusiasmo en el sector masculino.

Las marcas de lencería y ropa interior femenina deben estar que trinan. Las observaciones del profesor Jean-Denis Rouillon del Hospital Universitario de Besancon, en Francia, cuestionan la eficacia de los sujetadores para mantener el pecho en su sitio.