Las compañías, asfixiadas financieramente, barajan rescindir contratos o reducir servicios. ACS, FCC, Ferrovial y Sacyr son los líderes de un sector que emplea a 110.000 personas. Hace algo más de un año, las empresas especializadas en la recogida, limpieza y tratamiento de residuos urbanos advirtieron que la morosidad de los ayuntamientos, sus clientes, se estaba convirtiendo en un problema grave, que podría poner en riesgo la viabilidad del negocio. Doce meses después, el problema se ha transformado en un drama empresarial.