Durante el mandato del socialista José María Barreda, sucesor de Bono como presidente autonómico, las prácticas de García Candau no cambiaron y, de hecho, ampliaron la variedad de productos cargados a la televisión pública. Entre ellos, destacan los de carácter electrónico: 15 televisores Philips de pantalla plana por 27.382 euros; ocho reproductores de música «Ipod Touch» por 2.872 euros; quince «Ipad» por 8.751 euros, 25 radios por 5.200 euros o una cámara fotográfica por 643 euros.