3 meses y pico después, estamos donde estábamos antes de Navidad. No sé cuántos días después y tras varios momentos de entusiasmo épico de la Letiziada fantaseando con pactos sin programa repartiendo carguillos a diestro y siniestro que han logrado convencer al PSOE de que unirse a C’s y esas ideas les garantizaría el apoyo pagafantístico de Podemos, hemos acabado donde empezamos. Menos mal que
#PodemosSeHunde, que si no, uno pensaría que se empieza a poner mal la cosa para los que han protagonizado el sainete.