Frontera de Ceuta. En la España gobernada por Abascal, las normas arancelarias han cambiado un poco…
-Buenos días- le dice el agente aduanero.
-Buenos dias, sinior…
-¿Me permite su pasaporte?
-Sí, sinior- le contesta el inmigrante mientras le tiende un pasaporte marroquí.
-Veo que tiene todos los permisos y visados…
-Sí, sinior, todo en regla.
-¿Motivo de la visita?
-Visitar mi hermana, vive en Málaga.
-¿Cuanto tiempo estará en España?
-Dos semanas.
-Bien. Entonces serán 7500 euros…
-¿Cómo? Pero si yo todo en regla, sinior…
-Sí, pero el nuevo gobierno ha puesto aranceles a los inmigrantes marroquíes, por si se les ocurre quedarse en el país y hay que darles pagas, ayudas al alquiler, ingreso mínimo… ¿Tiene el dinero?
-No, no lo tengo, no…
-Entonces no le puedo permitir entrar en España. ¡SIGUIENTE!
-Pero, sinior, por favor…
-Lo siento, la ley es la ley. Por favor, abandone la cola… ¡SIGUIENTE!