| La FAKEtidora de Menéame |
La tercera ola de frío que trae Herminia corrompe hasta los más fuertes.
RamBigen, residente de la residencia gallega "Una vejez unida", por fin ha recibido la segunda dosis de la vacuna contra el caravirus politico justo antes de la temida llegada de Herminia, la borrasca que puede causar enfriamientos muy malos y pulmonías graves dejando la inmunidad por los suelos a toda la población.
Como muestra de apoyo, su compañera de cuarto le ha dedicado una canción esta mañana para darle ánimos antes de inyectarse la vacuna, hecho que llamó la atención de nuestro confidente y nos dió la voz de alarma.
Fuentes de este diario han podido constatar que han existido irregularidades con la vacunación de RamBigen, te contamos la historia.
Tras varios días de preparativos y temiendo lo peor ante la falta de jeringuillas, hemos descubierto que este anciano ha podido conseguir en el mercado ilícito varias jeringas (especiales para culillos) gracias a sus contactos en Vietnam de "cuando era joven".
Tras adquirir las jeringas, RamBigen respiraba tranquilo, se aseguraba la posibilidad de recibir la tan ansiada inyección. Ahora solo necesitaba conseguir una dosis, aunque solo una fuera, ya que en estos momentos la producción mundial ha sido detenida como todos sabemos, por la explosión de la fábrica de la vacuna Antigua, la más eficaz contra el caravirus político que asola Galicia.
Aunque esta residencia gallega será una de las últimas en recibir la segunda dosis de la vacuna, RamBigen ha podido conseguir uno de los viales con culillos de vacuna de la última campaña de vacunación. Usando artimañas y trucos ocultos, va dando pena por sus heridas de guerra. Con su frase "no siento las piernas" ablanda el corazón de cualquier político, ya que cuando viene el frío a todos les duelen las heridas de guerra a reventar, consiguiendo así que le dieran de la basura un víal desechado. Cuando el residente sostuvo el culillo en sus manos, no podía creerlo. Ahora solo tenía que regresar a su residencia, pues no llevaba consigo las jeringas.
El frío seguía dándo suerte a RamBigen. Gracias a las temperaturas invernales de esta tercera ola, pudo regresar a su residencia blanca de Añoralgias a tiempo y mantener la cadena de frío. El culillo pudo llegar en perfectas condiciones desde la otra residencia donde mendigó el vial, todo un logro digno de RamBigen.
Técnicamente hablando él ha tenido un fallo... y ustedes mucha suerte.