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Refutación del cientufismo (I): la ciencia ni lo sabe todo ni puede saberlo, la especulación extracientífica es legítima
La ciencia se basa en el método científico aplicado a la experiencia. En consecuencia, lo que no se puede experimentar no puede ser objeto de la ciencia, de hecho, no parece ni siquiera sensato tener en cuenta su existencia puesto que en nada puede afectar. Una excepción es la historia. Todo el mundo cree que antes de que naciera existía el mundo y en él sucedían cosas pero el tiempo pasó y eso ya no existe. Por tanto, no se puede aplicar el método científico a la historia para deducir las leyes que la rigen puesto que por definición el pasado no existe en el presente. Por otro lado, nadie salvo algún demente piensa que pese a que la humanidad es parte de la naturaleza y la historia humana es protagonizada por la humanidad, esta carece de toda determinación y es puramente aleatoria. Todo el mundo intuye que el curso de la historia responde a una serie de leyes o tendencias ignotas que hacen que por ejemplo ninguna nación decida abandonar sus ciudades y volver a habitar las cuevas y dedicarse a la caza y la recolección.
Por eso, no existe ninguna ciencia que consista en descubrir las leyes de la historia humana, porque por definición eso queda fuera del alcance de la ciencia. Por tanto, la ciencia ni lo sabe todo ni puede saberlo. Y en consecuencia, ¿qué hay de malo en la especulación extracientífica en aquellos ámbitos en los que por definición no cabe la ciencia? Sería una absoluta necedad llamar "magufo", "pseudocientífico" o cualquier otra chorrada de esas a las que son aficionados los fanáticos de la ciencia, a quien elabore teorías o hipótesis acerca de la evolución histórica de las sociedades humanas puesto que no podemos hacer otra cosa y todo el mundo es libre de creer lo que quiera y preguntarse sobre su propio pasado.
Por eso, no existe ninguna ciencia que consista en descubrir las leyes de la historia humana, porque por definición eso queda fuera del alcance de la ciencia. Por tanto, la ciencia ni lo sabe todo ni puede saberlo. Y en consecuencia, ¿qué hay de malo en la especulación extracientífica en aquellos ámbitos en los que por definición no cabe la ciencia? Sería una absoluta necedad llamar "magufo", "pseudocientífico" o cualquier otra chorrada de esas a las que son aficionados los fanáticos de la ciencia, a quien elabore teorías o hipótesis acerca de la evolución histórica de las sociedades humanas puesto que no podemos hacer otra cosa y todo el mundo es libre de creer lo que quiera y preguntarse sobre su propio pasado.
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