El número de este mes de ‘The Psychologist’, la revista oficial de la BPS, hablaa sobre los hombres. Y desde un lugar distinto al que estamos acostumbrados, desde los problemas y las desigualdades que afectan al hombre.

El feminismo de género adopta ideas del marxismo, y particularmente de los escritos de Engels, quien considera que hombres y mujeres reproducen la dinámica de opresor y oprimido visible en otras relaciones sociales, como la de burgués y obrero, noble y siervo, amo y esclavo, etc. En las últimas décadas a estas relaciones se añadieron otros dualismos que aunque no eran propiamente marxistas indicaban relaciones de dominio y desigualdad, como el racial entre blancos y negros en Estados Unidos.

Muchas discusiones sobre temas de género han terminado con la invocación de un pasado en el que la mujer ha sido explotada y oprimida consistentemente por el varón, llevando a la necesidad de realizar enmiendas en el presente a fin de rectificar la histórica injusticia. Este discurso sobre el pasado en no pocas ocasiones desemboca también en actitudes revanchistas, ¿pero hasta qué punto es cierto?

Recuerdo que la autora, Cassie Jaye, ha abandonado el feminismo durante la realización de la película.

«La película ha sido descrita como una especie de conversión camino de Damasco. No lo es. Es el dolor de la pérdida de la fe por parte de una feminista con carnet, y su viaje a los territorios inexplorados en el otro lado...

A medida que su fe feminista se debilita Cassie intenta restaurarla buscando consuelo en los rituales del dogma. Ella acude a grupos, marchas y concentraciones feministas...

No importa lo mucho que Cassie trata de someterse a un adoctrinamiento feminista, es incapaz de aguantarlo y eso le causa mucha angustia. Se vuelve hacia gurús feministas incluyendo Spillar, Kimmel y Messner. Sin embargo, ellos nunca se han encontrado con desafíos a su ideología y parecen sorprendentemente ignorantes. Más importante aún, son ignorantes de su propia ignorancia, lo que los deja en una situación nada convincente.

En los términos de la consigna tomada de Matrix, Cassie ha tomado la píldora roja».

El estadounidense Noam Chomsky considera que "la clase obrera masculina blanca que apoya a Donald Trump está cometiendo un grave error... Pero sus quejas son reales y comprensibles" dado el "aumento alarmante en los índices de mortalidad para una generación de escasa educación. Que la mortalidad esté aumentando en estos sectores es una cuestión desconocida en las sociedades desarrolladas, y un signo de profundo malestar social. Los salarios reales de la población masculina están a nivel de la década de 1960".

La imagen de violencia doméstica es generalmente la de un hombre abusador y una mujer víctima, pero un estudio realizado en EE.UU. dice que las relaciones entre parejas homosexuales son más propensas a sufrir ese problema.

Se acepta la demanda del estudiante Paul Nungesser, que fue denunciado en falso por la famosa "chica del colchón" en la Universidad de Columbia, que tiene por objeto demostrar que fue víctima del sesgo anti-hombres.

Se han escrito ríos de tinta sobre la imagen del osado guerrero que rescata a una doncella en apuros (generalmente princesa) de las garras de un malvado monstruo. Desde la perspectiva de género, esta imagen se ha citado en las narrativas tradicionales y modernas para criticar la pasividad de la doncella, la imagen de la mujer como un ser desvalido, su carácter de trofeo, etc. El análisis que realizaremos en este blog partirá de una perspectiva diferente: nos centraremos en casos históricos donde esta narrativa se ha empleado para alcanzar fines políticos utilizando la desechabilidad masculina.

Resulta muy fácil culpar a los hombres de no "expresar sus sentimientos" debido a su "masculinidad tóxica", pero para prevenir el suicidio masculino se necesita una terapia amigable con los hombres.

"Un estudio de los terapeutas experimentados (...) encontró que los hombres y las mujeres tienden a adoptar un enfoque diferente al tratamiento donde la diferencia clave es que las mujeres quieren hablar de sus problemas". (...)

"Un segundo estudio presentado en la conferencia encontró que los hombres, más que las mujeres, expresaron su preferencia por un tipo de tratamiento que implique compartir y recibir consejos sobre sus preocupaciones en grupos informales".

Las actuales estrategias para prevenir el suicidio no atienden a las demandas masculinas a pesar de que los hombres tienen muchas más posibilidades que las mujeres.

Origen plus.google.com/+DavidPrieto100/posts/aG6cwESEq3z
Video www.youtube.com/watch?v=mJSl99HQYXc
Documento www.refugeelawproject.org/files/others/SSI_2013_report.pdf
"Sin datos, no hay debate"
Sexual violence is one of the most horrific weapons of war, an instrument of terror used against women. Yet huge numbers of men are also victims. In this harrowing report, Will Storr travels to Uganda to meet traumatised survivors, and reveals how male rape is endemic in many of the worlds conflicts

«Como varón que ha sufrido de depresión y continúa trabajando la depresión y la ansiedad en un grupo de apoyo para hombres, creo que la depresión en los hombres está poco tratada. Muchos hombres no admiten tener depresión».

«Se analizaron 700 millones de palabras, frases y ejemplos de temas recogidos de los mensajes de Facebook de 75.000 voluntarios a los que se hicieron tests de personalidad estándar. Encontramos variaciones notables en el lenguaje en relación a la personalidad, género y edad. (...)

Las mujeres utilizan más palabras emocionales (por ejemplo, 'emocionada'), y en la primera persona del singular, y mencionan procesos más psicológicos y sociales (por ejemplo, 'te amo' y '<3'). Los varones utilizan más palabrotas, las referencias a objetos (por ejemplo, 'xbox' y palabrotas)

En el estudio se sugiere que las mujeres hacen más referencia a la pareja de otra mujer. Por ejemplo, "Ayer me encontré a María con su novio", "El marido de Juana es fantástico", etc. Al parecer los hombres hablan más de la propia pareja que de la de otros hombres, y eso explica en parte que utilicen más el posesivo "mi". Por ejemplo, "Ayer me encontré a Juan mientras paseaba con mi novia".

Un artículo bastante rico en fuentes y estadísticas.

Reconozco que no me gustó fue el encabezado "¿envidias a los hombres?", pues ambos sexos tienen que lidiar con sus problemas, muchas veces en esferas diferentes.

Dicho esto, el artículo está muy trabajado y considero que puede ser un buen punto de partida para analizar la situación de los hombres en el país.

Es el producto cultural de una sociedad cuyos avances tecnológicos han superado a la capacidad humana para adaptarse y ajustarse funcionalmente. Si va a haber respuestas, y creo que al final las habrá, se encontrarán en una comprensión más matizada de la condición humana que va más allá del etiquetado de todo el comportamiento disfuncional como una falla en el carácter.

El problema con demasiado feminismo actual, en mi opinión, es que incluso cuando golpea desde posturas progresistas, que emana de un punto-de clase media alta, titulado de vista. Exige la intrusión y protección de las figuras de autoridad paternalista para proyectar una utopía hipotético que será mágicamente libre de ofensa y dolor. Su actuación policial desenfrenada de pensamiento y expresión es completamente reaccionaria, una grave traición a los principios radicales de la década de 1960 la contracultura

El líder laborista Jeremy Corbyn dice que Gran Bretaña es muy machista y que eso está motivando a los hombres a cometer suicidio, pero tal vez no es lo 'suficientemente hombre' para abordar los problemas de los hombres, escribe Glen Poole.