La semana pasada, tras meses y meses de duras y tensas negociaciones, Spotify firmó un acuerdo histórico con Universal que básicamente le permite tomar oxígeno y clarear su complicada senda hacia la rentabilidad. A lo largo de su historia, Spotify se ha ganado el respeto de la industria, el respeto de su competencia, la simpatía de los usuarios y el derecho a tener un hueco en la historia de la música. Apostó por un modelo, creyó, y hoy la música entera no se entiende sin él. Pero le faltaba algo: la dependencia.
|
etiquetas: spotify