Si en algo estuvo exacto José María Aznar aquel aciago 11 de marzo de 2004 fue en calificarlo como “el día de la infamia”. Una acertada definición ante la barbarie del atentado y el atroz fanatismo yihadista que lo inspiró, responsable único de la matanza. Por eso sorprende que el entonces presidente del Gobierno decidiera prolongar la ignominia y el dolor de las víctimas no solo en aquellos días, sino en los meses e incluso años posteriores, al arrojar toda clase de dudas sobre quiénes fueron los causantes de aquella atrocidad.
|
etiquetas: veinte años , infamia , 11m , aznar , ignominia