Apenas unas horas después de que Vladímir Putin deslizara una clara amenaza a la supervivencia de la civilización apelando a la guerra nuclear, el ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, ha declarado que Israel «no se opondría» a la destrucción del mundo dado que tiene «sobrados indicios» de que alberga armamento del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás). «En el mundo se esconden los líderes terroristas que amenazan la paz en el mundo y, por lo tanto, destruir el mundo es destruirlos a ellos», ha razonado Gallant.