Reseña del Trout Mask Replica de Captain Beefheart

A mí el Lemmy el de Mötorhead me dijo que la mejor música es la que te hace imaginar.

Pues con este disco imagino. ¿Es grave, doctor?

El Youtube Poop de la música, veintiocho dank memes pa tu body y con mucha imaginación nuestras madres en bragas.

Son los extremos que se tocan, confundiéndose. Hay rock y blues convencional, pero también avant-garde del que te esnifas en vena. Es ese vecino raro que escucha su música extraña y elitista a todo trapo.

Sí, exacto: tú.

Toda situación imaginable. Todo lo importante. Una mierda como un piano. ¿Y acaso no es lo que importa del arte? Que exprese, y aquí hay una amalgama importante. Prepara la vaselina.

Y una cuchara muy grande.

Prepara el alma que viene el siguiente paso. Se dice que la música no vuelve a ser la misma tras escuchar a los Beatles. Luego o antes le tiras a algo pretencioso pero molón, como el rock progresivo. Te da por escuchar los mejores tops y charts, dejando de tener manía al country. Contento por tu amplitud, por lograr y conocer todo género gracias a RYM, por dejar de aguantar lo comercial para disfrutarlo e integrarte de una vez con los amigos, va y surge algo más. La culpa del Scaruffi, que el cabrón es muy cabrón y es un hater de cuidado, pero todo el mundo le hace caso. Odia a los Beatles, y como fan no supe cómo contradecirle, todo lo dice con peso. Además piensa que ciertas bandas están sobrevaloradas, y como coincidí, me torné complice, y me queda darle la razón y agacharme.

Oh, gran Scaruffi, dime cuál es el mejor disco ever.

Este.

¿Este? ¿Estás seguro?

Que siii, capulliniiii, carajiiiii

Capisci?

Y me lo puse. Pero antes vino el de Faust, que de tan nihilista se me puso dura hasta el suicidio. Me dieron otra oportunidad en el más allá y me vine a escuchar esto.

Droga dura, ¿eh?

Pero es el siguiente paso para abrir el tercer ojo musical, tron, como te pasara con Tool.

Ahora digo, imagina la canción que sea de este álbum en una discoteca. A todo volumen. MATO por presenciar eso. La bomba, lo que define la personalidad de esta música de fumados muy cuerdos. Dicen que el humor es de inteligentes, pues esta es la broma que hizo llorar al Comediante de Watchmen.

Cada canción una desolación, una decadencia, un asumir sin sentido aparente, el loco al que se le tiene compasión y le duele.

Es la locura secreta del hombre. ¿Te has parado a pensar que esto lo han compuesto seres humanos como nosotros?

Y de mientras, ¿qué piensan las feministas de todo esto?

Para que luego me digan que estoy loco. Anda y poned este disco, desgraciados.

Si leéis entre líneas, ya no volveréis a ser los mismos.

En serio, porque yo no he podido. Por ahora.

Amén.

P.D.: Con el tema Pena me dio la risa. Es genial. Necesito abrir más mi alma a este disco, sin temor a perderla.

UPDATE:

Al fin lo he comprendido. Imagina que jamás has escuchado música y tu única referencia es este disco. Tu forma de tocar y cantar se basará únicamente en estas referencias. Para poder entender la intención haría falta estar mucho tiempo sin escuchar música (imposible o casi) y entonces escuchar el álbum.

Mi pregunta fuerte es qué sucedería si la primera música de un niño fuese este disco. ¿Cuál es su reacción? ¿Lo sabría imitar con facilidad si comenzase a aprender música? Y es que este álbum representa la verdadera libertad: esta vez sí.

Imagina no tener ataduras ni condicionamientos de ningún tipo, ni sociales, de entorno, leyes... Nada. Absolutamente nada te ha influido. Eso es Trout Mask Replica. El verdadero mérito de los notas de Captain Beefheart es haber compuesto Blues y Rock sin más influencias que su propio yo.

Sin ataduras, sin nada previo como niños recién nacidos. Magia real, colegas.

Bueno, la droga también tuvo que ver.