Si hay en Suiza un viaje espectacular en tren ese es el que asciende a la Jungfrau a través de los montes Eiger y Mönch. Desde hace cien años esta subida espectacular al "techo ferroviario" de Europa seduce a alpinistas y turistas. Y es que, a casi 4.000 metros de altura, la naturaleza estalla alrededor de las tres míticas cumbres alpinas y el glaciar más grande de Centroeuropa.