"El monumento megalítico de Stonehenge, que atrae anualmente a turistas y hippies de todo el mundo y en el que algunos han visto un antiguo observatorio astronómico, fue una especie de santuario para los antiguos druidas, según un nuevo libro publicado en el Reino Unido. Los habitantes de las islas británicas acudían a ese monumento que data de entre los años 2500 y 2000 antes de Cristo, para curarse de sus males como hoy hacen los cristianos que viajan a Lourdes en busca de algún milagro, afirma Timothy Darvill..."