El cantante británico, asentado en Suiza, lamentó que la música que se hace hoy en día "carezca de la magia que tenía la música de los 60. Lo que se hace hoy, no es para nada comparable". Para demostrarlo, Collins pone un ejemplo: "Estuve en los Premios Brit de este año. Aguanté dos horas allí y aunque escuché mucha música, no oí ni una sola canción. Igual es que no soy su público objetivo, porque tengo 59 años, pero a mí Lady GaGa no me dice absolutamente nada. Igual hasta es muy buena y todo, lo que quieras, pero no me llega".