Nadie se atreve a calcular su patrimonio, y, aunque buena parte de las naves del polígono de Cobo Calleja es de su propiedad, y a pesar de que sus empresas exportan a 110 ciudades de España y Europa, su faceta más conocida hasta ahora no era la de hombre de negocios de éxito, sino la de filántropo y mecenas del arte chino en España, incluso llegó a fotografiarse con el Rey en una cena.