La justicia social, según la izquierda buenista de cuya propaganda tanto se ocupa TV3 sin el menor reparo, es despreciar a curas y monjas que se juegan la vida por los demás cada día del año, manchándose de lo que haga falta, renunciando a cualquier riqueza personal y sin que lo sepa nadie; mientras ellos no hacen más que crear pobreza con sus políticas aberrantes, y reírse luego de los pobres mientras les exprimen hasta la última gota de su miseria miserable para hacerse los buenos y los solidarios.